Viernes 18 de noviembre de 2011

En este día tan especial, digo especial por estar celebrando un año más de vida, iniciamos el día con la oración, pero lo bonito fue que después todos los niños y mi maestra me cantaron el cumpleaños, lo cual me hizo sentir muy contenta.

Después de este emotivo homenaje, empezamos nuestras labores escolares, con la clase de ciencias naturales, revisamos la tarea que se había asignado para la casa, la socializamos y la corregimos, luego continuamos el trabajo de la guía.

En la segunda hora de trabajo iniciamos la nueva guía de la independencia de nuestro país, para ellos se le había pedido a los estudiantes que consultaran o preguntaran en casa que conocían acerca de este tema, de acuerdo a lo que se socializo de la tarea iniciamos el trabajo del esta nueva guía.

Después del descanso se revisó y corrigió la tarea de matemáticas en general con todo el grupo, para aclarar dudas y afianzar los conocimientos.

En las dos últimas horas de trabajo se tenía programado continuar corrigiendo y socializando la guía de español que estábamos trabajando, pero como solo muy pocos la llevaron a clase el trabajo no estaba siendo del grupo completo, así que se decidió cambiar esta actividad por otra, y continuamos trabajando la guía de sociales que habíamos empezado en las primeras horas de la jornada.

La experiencia más significativa de este día, fue personalmente la alegría que se siente cuando tus alumnos te demuestran cariño en un día especial para ti, y profesionalmente es que como maestro uno aprende a dar soluciones a inconvenientes inesperados que se presentan en el aula para beneficio tanto del maestro como de los estudiantes.

La reflexión de este día es que se puede recibir mucha construcción teórica, normativa, pero la mejor formación como maestros la recibimos en nuestras prácticas pedagógicas.